Con la publicación de esta entrada, probablemente daré por cerrado el blog, ya que su objetivo era contar a todo el que quiera leerlo la experiencia vivida haciendo el Camino de Santiago.

     Hoy solo quiero agradecer a todas las personas que me han apoyado para poder realizar esta aventura y a todos los que se han interesado por nosotros durante los días que ha durado el camino.

     No me gustaría olvidar a nadie ya que seria totalmente injusto, por eso no voy a nombrar a nadie. Por supuesto y principalmente a mi mujer, le costo trabajo aceptar que me fuera tantos días a hacer esta "locura", pero al final dio su brazo a torcer y no me puso mayores impedimentos, junto a ella al resto de mi familia y a mis amigos y compañeros de trabajo que día tras día mostraron su interés enviándonos mensajes de apoyo  a través de whatsapp.

    

 

 

 

                                                            MUCHISIMAS GRACIAS A TODOS

    

Etapa 10ª.  Ourense - Santiago de Compostela (05/08/2013)

     Como de costumbre, a las 6.15 suena el despertador, recogemos, vamos a por las bicis que las teníamos en un garaje cercano ya que no había sitio seguro en el albergue y desayunamos en un bar cercano.
     Salimos de Ourense por su puente romano acompañado de otro ciclista de Jaén y tres portugueses, estos pronto se despistan y seguimos los tres siguiendo las flechas amarillas, cuando llegamos a la altura de la estación de renfe, las flechas nos indican hacia la izquierda y este hombre nos dice que hace un par de años el hizo el camino y en ese punto giro a la derecha, Juan Carlos y yo decidimos seguir las flechas hacia la izquierda y el se viene con nosotros.
     Brutal la salida de Ourense, una carretera de unos 4 kilómetros con un desnivel mínimo del 12 - 13%, empezamos a subir bien, cada uno a su ritmito, Juan Carlos se empieza a marchar poco a poco y yo sigo con el de Jaén, pero cuando me veo obligado a poner el plato pequeño, algo no va bien, roza algo y la bici se frena, el problema era que tenia el desviador doblado y rozaba en la rueda trasera frenando la bicicleta, mala suerte, pie a tierra hasta llegar arriba, ya que era imposible ir con otro desarrollo que no fuera ese. Cuando llego arriba Juan Carlos se había echao la siesta tres veces el hombre.
     En este punto nos separamos del  jaenero, ya que el tira por carretera y nosotros por caminos, pero parece que no le gusta mucho que no le acompañemos y marcha con un poco de malos modos, en fin hicimos lo que creímos correcto.
     El camino que tomamos termina en una carretera secundaria que tras unos kilómetros nos llevo a la carretera nacional que va directa a Santiago de Compostela. Unos kilómetros después de entrar en esta carretera nos da alcance el jiennense que poco a poco nos deja tras adelantarnos sin decirnos esta boca es mía. La carretera es dura, con muchas subidas fuertes, algunas muy largas, y en una de ellas pasamos al muchacho de Jaén que esta parado en el arcén parece que con avería, le preguntamos si necesita ayuda, nos dice que no, pues palante, y tras alguna que otra parada "técnica" y una larga etapa y bastante dura aunque gran parte de ella la hicimos por carretera, por fin llegamos a nuestra meta, nuestro objetivo estaba conseguido con mucho esfuerzo y algo de sufrimiento, por fin entramos en Santiago de Compostela.
     Una vez en Santiago, te embarga un sentimiento raro, indescriptible, de haberlo conseguido, un "por fin" pero a la vez un "ya", la cabeza da vueltas pensando en todos los que nos apoyaron en hacer realidad este sueño y en los que no lo hicieron tanto, en los que nos esperan ansiosos y con los que nosotros esperamos aun mas ansiosos poder reunirnos de nuevo, en fin una amalgama de sentimientos muy difíciles de describir.
      Final de la aventura, hermosa aventura, reto conseguido.

  

 

Etapa 9ª. Lubian - Ourense (04/08/2013)

     Hoy entramos en Galicia y se produce un cambio espectacular del terreno y los paisajes. Hoy como de costumbre salimos temprano, aun de noche, a las 7 de la mañana mas o menos y preparados para afrontar lo que creíamos el mayor obstáculo del día, el puerto de A Canda, a escasos 5 kilómetros de Lubián. De igual manera que ayer, pensamos que la subida seria  por carretera, pero NOOOOO. Salimos del pueblo por un camino en buen estado y en bajada por lo que los primeros kilómetros se hacen relativamente rápidos, al poco el camino comienza a empinarse poco a poco, por lo que pensamos que era el inicio del puerto, pero prácticamente sin darnos cuenta el camino se fue estrechando hasta convertirse en una senda rodeada de vegetación por todas partes y cruzada por arroyuelos, troncos, piedras, de tal forma que se hizo totalmente intransitable para una bicicleta, por tanto pie a tierra y a empujar y tirar de las bicis por un sitio donde difícilmente se puede caminar normalmente.

      Después de apenas avanzar poco mas de 1.5 kilómetros en una hora, conseguimos salir del bosque y llegamos a una carreterita secundaria sin ningún trafico por la que bajamos a toda velocidad hasta A Gudiña, primer pueblo de Galicia, donde paramos a tomar un café para quitarnos el mucho frío que pasamos. Hecho esto seguimos el camino, que en esta ocasión va siguiendo una carretera secundaria sin trafico, la cual no para nunca de subir... y subir....y subir....y subir.....y....nunca terminaba de subir, siempre suavemente pero de una forma constante solamente interrumpida por algún que otro fuerte repechón. Es este tramo donde tenemos unas vistas de unos paisajes espectaculares, estábamos practicamente en el cielo después de tanto subir.

     Sobre las 11.30 llegamos a Leza después de 58 kilómetros, sin desayunar, con mas hambre que un lagarto detrás de una pita, por lo que nos vamos al bar "a picota" donde nos dijeron que nos darían bien de comer, y era cierto, nos comimos un pedazo de bocadillo de tortilla que no lo saltaba un galgo y que nos dio fuerzas para seguir adelante.

     El próximo destino era Villar de Barrio, a  "solo" 20 kilómetros de distancia, pero nos costo muchísimo llegar, entre alguna que otra confusión con las señales, las indicaciones que nos dieron que no eran todo lo clara de debieran haber sido y el terreno que por momentos se hacia durísimo, a duras penas y después de 2.45 horas, sobre las 3 de la tarde por fin conseguimos llegar, buscamos para comer y tan dura fue la etapa hasta ahora que charlando mientras comemos llegamos a plantearnos hacer fin de etapa aquí en vez de llegar a Ourense, pero como ocurre cada vez que paramos a comer y descansamos  un rato nos recuperamos, miramos el perfil hasta Ourense, 35 kilómetros pero casi todo en bajada, por lo que decidimos seguir, total ya que estamos.... El camino hasta Ourense era por carretera, por lo que sin problemas a las 5.30 de la tarde llegamos a nuestro destino. Tuvimos que cruzar toda la ciudad para llegar al albergue. Ducha y siesta para recuperar que a estas alturas de camino ya nos iba haciendo mucha falta.
      A las 7  de la tarde salimos para ver un poco del centro  de la ciudad  y tomar algo, cosa que gracias a mi buen amigo Elias hicimos de escandalo ya que nos indico los sitios a los que debíamos dirigirnos, y aunque  nos quedamos con las ganas de ir  a las Burgas, lo que nos "obliga" a volver, nos pareció una ciudad muy bonita.
     Tras esto, de vuelta al albergue a descansar, ya que si Dios quiere mañana terminamos nuestro camino y nos espera una ultima etapa muy larga y bastante dura.

Etapa 8ª. Santa Marta de Tera - Lubián (03/08/2013)
    
     La etapa de hoy decidimos hacerla por carretera, ya que tras pasar una noche no muy buena no me encontraba con fuerzas suficientes para hacerla por caminos.
     La primera parte de la etapa fue bastante rápida y a las 9 de la mañana ya habíamos echo los primeros 36 kilómetros que nos separaban de Mombuey, lugar en el que decidimos parar para desayunar.
     Decir que hoy es la primera vez que sentimos frío por la mañana, en la parada del desayuno imagino que seria al enfriarse el sudor me entro tal tiritera en el bar que me tuve que poner una camiseta térmica de invierno y ni aun así pasaron los tiritones. De esa guisa seguimos camino hasta Puebla de Sanabria, donde llegamos bastante cansados.

     Después de visitar el pueblo, precioso por cierto, y tomar algo, pusimos rumbo al puerto del Padornelo, puerto l que sobre el papel  temíamos bastante, pero en la practica lo superamos, cada uno a su ritmo, con menos dificultades de las previstas. Una vez arriba, ya todo consistía en una rapidísima bajada hasta el destino de hoy, Lubian, ultimo pueblo castellano antes de entrar en Galicia.

       Aunque Lubian no pertenece a Galicia, sus influencias son totalmente gallegas, tanto por el tipo de construcciones como por el acento de su gente, tanto incluso que los rótulos con los nombres de las calles están en gallego. Pues nada, sobre la 1.30 llegamos a Lubian, buscamos el albergue y la rutina de siempre, ducha, a comer y  rato de siesta. Ya por la tarde visitamos el pueblo y al anochecer para el albergue a cenar y a la cama que mañana sigue el camino.

 

Etapa 7ª. Zamora - Santa Marta de Tera (02/08/2013)   

     6.15 de la mañana, despertador sonando y para arriba, recogida de bártulos y galletitas con cafelito en el albergue. A las 7.15 ya estamos en marcha, salimos de Zamora por carretera, pero a los pocos kilómetros entramos en el camino, llano, buen firme,  así que en poco tiempo estábamos entrando en Montamarta, primer pueblo en el itinerario de hoy, como era temprano decidimos seguir para desayunar en Granja de Moreruela, los caminos seguían  igual de buenos así que a las 10.30 mas o menos llegamos a Granja, no sin antes tener algún problemilla para salir de Montamarta, ya que las flechas indican un camino que termina justo en la orilla de un pantano, imagino que cuando hay poca agua se podrá cruzar por ahí, pero hoy tuvimos que salir a la carretera y tras 1.5 kilómetros volver  a entrar en el camino.  Pues eso, que a las 10.30 llegamos a Granja de Moreruela, pueblo importante en la Vía de la Plata, ya que justo aquí se dividen los dos caminos posibles, la Vía de la Plata sigue hasta Astorga para unirse al camino Francés o gira hacia Ourense por el camino Sanabres, que es el que nosotros hicimos.

Pese a esta "relativa" importancia del pueblo, estaba casi desierto y casi todo cerrado, solo encontramos un bar abierto donde poder desayunar, el del albergue del  pueblo, carísimo y de una calidad penosa, 6 euros por dos medias tristes tostadas con aceite sin nada mas y dos cafés.

Tras la  "clavada" seguimos camino hasta Tábara, destino de hoy, seguimos por caminos en buen estado, pero poco a poco empezó a entrar en zona de sierra hasta llegar a un punto en el que encontramos un cartel que impedía el paso a las bicicletas, solo los peregrinos a pie podían seguir por camino, por lo que sin otra opción seguimos por la carretera que de buenas a primeras empieza a empinarse y se convirtió en un puerto de unos 5 kilómetros con un desnivel muy considerable, al llegar a la cima, las flechas amarillas nos vuelven a desviar hacia una pista sin asfaltar pero en muy buen estado, por lo que a las 12 de la mañana llegamos a Tábara. Como era muy temprano y aunque hoy no vamos tan bien como en la etapa de ayer, hemos pillado todo el día el viento en contra, decidimos entrar en un bar a tomar un refresco y en un supermercado donde compramos para almorzar  y cenar hoy, y viendo el perfil llano de lo que resta de etapa hasta Santa Marta de Tera, decidimos terminar hoy en este pueblecito. El camino seguía estando en muy buen estado y salvo tres repechones bastante pronunciados que se nos agarraban fuerte a las piernas, llegamos a destino sobre la 1.45.

Como el pueblo es muy pequeño, sin problemas damos con el albergue en el que solo había 6 peregrinos y ni rastro del hospitalero, por lo que decidimos alojarnos, ducharnos y comer, justo entonces llega el hospitalero, que también es el alcalde, para sellar las credenciales, sellamos, le pagamos el alojamiento y a comer, hoy tenemos un poco de pasta, un preñao que compramos en Tábara (un pan cocido con chorizo y panceta dentro) y un dulce. A dormir la siesta para descansar un rato.

Por la tarde visitamos con el resto de peregrinos la iglesia románica del pueblo, donde se conserva la imagen mas antigua de Santiago con ropaje de peregrino, una pasada la iglesia tanto por fuera como por dentro. Después de dar una vueltecilla por el pueblo vuelta al albergue a cenar y a la cama, ya que mañana sigue el camino.

Hoy tengo que comentar que pase una noche regular, con vómitos incluidos, pero tras esto, el resto de la noche perfecta y por la mañana estaba totalmente recuperado.

Etapa 6ª. Fuenterroble de Salvatierra - Zamora (01/08/2013)
  
     Aunque es la etapa mas larga que llevamos hasta ahora (125 km.) también fue una de las mas llevaderas y mas rápidas, ya que prácticamente es toda llana y por suerte tuvimos viento a favor en toda ella.
     Salimos tempranito, igual que siempre, de Fuenterroble, después de tomar unas galletas y un café que te ofrecen en el albergue, pues eso, a las 7 ya sobre la bici y primero por carreteras secundarias, después por caminos y al final por carretera nacional con poco trafico, en solo 2 horas llegamos a Salamanca, directos  a la Plaza Mayor, algunas fotos y a desayunar unos pastelitos buenísimos, sello a la credencial y a tirar palante.

Unos kilómetros por carretera para salir de Salamanca y al poco rato entramos otra vez en caminos con muy buen firme, buena marcheta también y sin problemas llegamos a nuestro destino de hoy, El Cubo de la Tierra del Vino, que en realidad en todas las señales y todo el mundo lo conoce por  El Cubo del Vino, no se cual será el nombre correcto. Llegamos  tan temprano y nos encontrábamos perfectamente en lo físico que decidimos tomar algo y adelantar algunos kilómetros hasta Villanueva de Campean, solo 12 km. mas, a las 1.45 llegamos y tras intentar encontrar a algún ser humano que nos orientara en sus desiertas calles, tuvimos la suerte de toparnos  con "el bar" del pueblo, en cuya puerta había varias personas una de las cuales era la encargada del albergue, decidimos antes de ir a alojarnos y ya que estábamos en el bar comer antes, y en esa estábamos cuando llego un repartidor al bar y escuchando la conversión decide intervenir y nos dice que porque no nos vamos hasta Zamora que es una ciudad muy bonita y el pueblo donde estamos lo único que tiene para pasar la tarde era el barclubsocialcasinodejuegos y nada mas, porque además el pueblo es feo pero feo.

Después de la anterior experiencia en hacerle caso a los lugareños y por ese motivo con mucho recelo decidimos hacerle caso y arriesgarnos. Pues nada comida, ratillo de descanso y pa Zamora, buenos caminos, seguimos con viento a favor y a buen paso a las 3.30 con un calor que no veas cruzamos el Duero y entramos en Zamora. Nos vamos directos al albergue municipal, grande, y muy bueno y petao de gente, mientras el hospitalero, un italiano que apenas hablaba español nos toma los datos para el registro escuchamos a nuestra espalda una voz que dice "que tal esos andaluces", era Yolanda, la hospitalera que tan amablemente nos acogió en Alcuescar, que estaba pasando unos días aquí en Zamora. Tras los saludos, ducha y prácticamente sin descanso nos vamos a visitar la ciudad, preciosa, casco histórico medieval espectacularmente conservado, gente amable, una de las ciudades que mas me ha gustado de este camino, 100% recomendable visitarla.

Tras callejear por todo su casco antiguo y después de la panza de almorzar que nos dimos hoy junto con la merienda que consistió en unos donuts artesanales que estaban de muerte, decidido que la cena de ese día va a ser  una tarrinita de yogurt helado, propuesta a la que se unió Juan Carlos, la tomamos en una plaza en el centro de la ciudad rodeados de historia, espectacular sitio.

Tras esa cena tan light, vuelta al albergue y a la cama, ya que mañana nos queda mas camino por recorrer.

Etapa 5ª. Galisteo - Fuenterroble de Salvatierra (30/07/2013)
    
     La  etapa mas dura con diferencia de lo que llevamos de Camino de Santiago, pensaba que era solamente yo el que iba mal,  pero al llegar Juan Carlos me comento que a el también se le hizo muy dura la etapa.
     Salimos de Galisteo a las 7 y a las 7.45 ya estábamos en Aldehuela del Jerte donde paramos a desayunar, tras el desayuno donde volvimos a coincidir con los de Utrera, seguía fatal. Tras consultar el recorrido de la etapa decidimos hacerla por la carretera, pero un paisano que nos oye se mete por medio diciendo que el había echo el camino ya varias veces y que por los caminos era mejor, que si esta muy bien de firme, que si es  muy bonito, etc, total que nos despedimos de los utreranos y tiramos por el camino.....la madre que parió al paisano, cierto que empieza estando en muy buen estado, pero poco a poco se empieza a llenar de pedruscos, de tierra suelta y unos repechones que no veas, total un martirio, y para colmo poco a poco las flechas amarillas empiezan a desaparecer y para mas colmo el gps nos empieza a indicar que tenemos que seguir por un lugar donde.........no hay camino. Dios que desastre.  Después de andar un rato perdidos por una dehesa sin ninguna señal que nos orientara, saltando tapias de piedra  que cortaban el camino y mas por intuición que por otra cosa conseguimos llegar a Cáparra, ciudad romana con un emblemático arco de triunfo cuadrangular único en la península ibérica y paso "obligatorio" para todo peregrino que haga la Vía de la Plata.

Seguimos adelante por dehesa mal señalizada y caminos que van sobre la antigua calzada romana, en muy mal estado tanto por las piedras procedentes de la calzada como por la falta de mantenimiento de los mismos, lo que unido a la inclinación en muchos tramos y muy machacados que íbamos por la dureza de la etapa y el calor se nos hacia un verdadero calvario el seguir adelante.

     Así, a duras penas llegamos a Aldeanueva del Camino, población a pie del puerto de Bejar, donde en una tienda nos tomamos dos coca colas, un acuarius de litro y un par de barritas para tratar de reponer fuerzas, ya que en apenas 2 km. comenzaba el puerto y una vez coronado este 40 km. mas para terminar esta durísima etapa.
     Tras intentar reponer algo de fuerzas, tiramos palante y puerto de Bejar para arriba, la primera mitad son rampas  mas o menos suaves que se llevan bien hasta llegar a mediados del puerto mas o menos, donde esta Baños de Montemayor, lugar en el que paramos a refrescarnos un poco, tomar algunas fotos y sellar la credencial, una vez echo esto seguimos para arriba y esta parte del puerto ya si que es mas dura, tras coronar, entramos de nuevo por un camino que tras un precioso y vertiginoso descenso nos lleva a bajar todo lo que antes hemos subido. Tras varios kilómetros por carreteras secundarias llegamos a Calzada de Bejar, una aldeíta muy chiquitilla donde gracias a Dios había un bar en el que pudimos tomarnos una cervecita y descansar un rato al resguardo del calor que hacia. Salimos de bar y ya "solo"  nos quedaban 25 km. que no parecían muy duros vistos en el mapa, prácticamente llanos y en "suave" ascenso los últimos 5. Pues nada, valor y al toro, los comenzamos a buen ritmo y así seguimos unos kilómetros hasta que a Juan Carlos le empieza a "crujir" la bicicleta, cada vez crujía mas y mas y la razón no era otra que había roto los rodamientos del eje pedalier, a partir de ahí y tras una señal que nos indicaba que en 5km llegábamos a destino (hay por lo menos 8 km.) se empieza a empinar  el camino de tal manera que se nos hicieron eternos, una subida durísima, tuve que hacer alguna parada para recuperar y llegar arriba.
     Tras el martirio de la subida entramos en el pueblo a las 3.45, muertos, cansaitos a mas no poder, fritos por el sol............ directos al bar, peazo de tazón de gazpacho, plato de pasta y filetito de ternera con patatas, todo ello regado con sus correspondientes cervecitas y casi dos litros de agua. Una vez terminado y antes de buscar el albergue, el camarero que se volcó con nosotros para tratar de que estuviéramos lo mejor posible, le proporciono a Juan Carlos el numero de teléfono de un taxi para ir a Guijuelo a arreglar la bici.
     Llegamos al albergue, ducha y hoy sin descanso pillamos el taxi para Guijuelo, una vez en el taller el mecánico nos da la mala noticia de que es el eje pedalier pero que no tiene recambios para esa bici. Negociación con el taxista y rumbo a Salamanca, donde en el segundo taller y no sin ponernos algunas pegas al final de la tarde por fin reparan la bici, ya muy de tarde vuelta a Fuenterroble, solo tiempo para ir a cenar y a la cama ya que mañana nos quedaba mas camino por recorrer.